¿Qué es la técnica de respiración 4-7-8 y cómo nos puede ayudar cada día?
Junto con el sedentarismo, la obesidad y el tabaquismo, el estrés crónico es uno de los factores que aumentan nuestras probabilidades de enfermar
Imagina que, a nivel fisiológico, el estrés es una reacción de nuestro cuerpo ante una amenaza y estar estresado constantemente, es como si tuviéramos que escapar de un león las 24 horas del día, en un laberinto sin salida. Como para quedarse sin respiración, ¿no creen?
Dado que el estrés crónico tiene consecuencias reales en nuestra salud, como alzas en la presión arterial, problemas cardíacos, baja inmunidad o ansiedad (que, además provoca que comamos más y peor), es muy importante que no lo normalicemos y que tomemos cartas en el asunto antes de que ese estado constante afecte a todo nuestro organismo.
Aprender a respirar mejor: una buena vía de escape
La mayor parte del tiempo, no prestamos mucha atención a nuestra respiración. Como sabemos que es algo automático, confiamos en que el cuerpo lo hará bien por nosotros. Sin embargo, cuando estamos estresados, respiramos de forma corta y superficial, y eso perjudica nuestra salud de distintas maneras.
Tanto en el yoga como en otras disciplinas, la respiración tiene un rol fundamental: cuando nos hacemos consciente de ella, nos relajamos y nuestro cuerpo puede salir de este estado de alarma constante tan nocivo.
Existen varias técnicas de respiración, pero hoy hablaremos del “4-7-8”. ¿De qué se trata? El Dr. Andrew Weil, fundador del Centro de Medicina Integrativa de la Universidad de Arizona (EEUU) creó esta fórmula que ha ganado gran fama por su efectividad.
¿Cómo se practica?
Cada vez que te sientas demasiado estresado/a o que te cueste dormir, siéntate o acuéstate en una posición cómoda. Idealmente, en un lugar libre de ruidos o interrupciones.
Con la boca cerrada, pon la punta de la lengua en la parte superior de tu boca (paladar) y vacía tus pulmones completamente. Luego, comienza a inspirar por la nariz, contando hasta 4. Mantén el aire durante 7 segundos y exhala por la boca durante 8 segundos. Repite el ejercicio al menos cuatro veces y mientras lo haces, visualiza un lugar tranquilo, que te produce felicidad y calma.
Haciendo este ejercicio habitualmente, notarás que poco a poco el estrés comenzará a ser menos intenso y que tu sensación de bienestar general estará presente en tu día a día.
¡No olvides que tu salud emocional juega un rol importante en la prevención de enfermedades!